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¿Por qué hablo de acompañamiento y no de tratamiento o intervención?
Es cierto que intervención y tratamiento son las palabras más comunes para referirnos a los servicios que ofrecemos en disciplinas sociosanitarias. Sin embargo, para mí se quedan cortas todavía, por eso prefiero hablar de acompañamiento.
Estos últimos años está habiendo un auge de formas de trabajar que no se basan sólo en un tratamiento exclusivamente clínico. Puedo mencionar el Modelo Centrado en la Persona / Familia.
Estos dos enfoques van más allá de la intervención directa con cada paciente, algo que me parece fundamental, ya que nos invitan a poner el foco en las personas con las que trabajamos, en sus familias y su entorno. Por tanto, y entre otros motivos, para facilitar este cambio de paradigma,
“siento que mi rol como profesional no se basa tanto en tratar o intervenir, sino principalmente en acompañar con mis conocimientos a quienes son realmente protagonistas de sus vidas.”
Partiendo de esta idea, entiendo la planificación como una hoja de ruta. En ella se marca el camino a seguir, pero lo haremos de formar flexible en función de las necesidades de cada momento. Por eso, considero importante que los objetivos no se basen exclusivamente en los síntomas, sino principalmente en la persona y sus necesidades.
La suma de todo esto ayuda a que todas las personas implicadas vivamos este proceso de forma más fluida, sin sumar más esfuerzo del que ya viene de por sí. De esta forma, cualquier imprevisto u obstáculo lo podemos tomar como aliado para lograr los objetivos.